¿Estás planificando tu próximo viaje a Sevilla? El Real Alcázar es uno de los monumentos imprescindibles que deben estar en tu lista de visitas obligadas.
El Real Alcázar es un enclave en el que se dan la mano perfectamente la historia y el arte de oriente y occidente, del siglo XI al siglo XXI. Es quizá uno de los monumentos con mayor valor histórico por la mezcla exquisita entre culturas.
¿Qué es lo más representativo del Real Alcázar de Sevilla?
1. Sus jardines. Lugar habitual de sus pavos reales —sus auténticos guardianes— los espacios exteriores combinan los elementos arquitectónicos árabes, las fuentes, los naranjos y una gran variedad botánica. Destacan los Jardines del Príncipe (y su fuente de Neptuno) y los Jardines del Naranjal (donde puede verse la fuente del León) y el Pabellón de Carlos V.
2. Su majestuosidad. Como su propio nombre indica, ha estado históricamente al servicio de la realeza y altas personalidades como alojamiento y así continúa en la actualidad. De hecho, es el palacio real en activo más antiguo de Europa.
3. Su mezcla de culturas. Está compuesto por varios edificios pertenecientes a épocas distintas, vivo testigo de la historia de la ciudad y del pulso de corrientes artísticas. Se edificó sobre un antiguo asentamiento romano que luego pasó a ser visigodo y más tarde se convirtió en una basílica paleocristiana. Pero comenzó a tomar su aspecto actual cuando los árabes tomaron la ciudad en el 713. Tras la Reconquista cristiana, los monarcas planificaron ampliaciones (salones góticos y el Palacio Mudéjar). De hecho, la Unesco lo declaró Patrimonio de la Humanidad.

4. Una historia de amor en sus profundidades. Cuenta la leyenda que el rey Pedro I al margen de sus matrimonios mantenía una relación amorosa con doña María de Padilla, la noble junto a la que descansa en la Catedral de Sevilla. Se dice que vivía en el palacio y le gustaba bañarse en el aljibe. Hoy el lugar es conocido como los Baños de Doña María de Padilla. De este entorno destacan sus bóvedas góticas y la escasa luz natural, que lo hacen uno de los lugares más frescos de la ciudad.
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